jueves, 26 de abril de 2012

Lo que he aprendido de la vida




He aprendido que no puedo hacer que alguien me ame, sólo convertirme en alguien a quien se puede amar; el resto depende de los otros.

He aprendido que por mucho que me preocupe por los demás, muchos de ellos no se preocuparán por mí.

He aprendido que puede requerir años para construir la confianza y únicamente segundos para destruirla.

He aprendido que lo que verdaderamente cuenta en la vida, no son las cosas que tengo alrededor sino las personas que tengo alrededor.

He aprendido que puedo encantar a la gente por unos 15 minutos, después de eso necesito poder hacer más.

He aprendido que no debo compararme con lo mejor de lo que hacen los demás, sino con lo mejor que puedo hacer yo.

He aprendido que lo más importante no es lo que me sucede sino lo que hago al respecto.

He aprendido que hay cosas que puedo hacer en un instante que ocasionan dolor durante toda la vida.

He aprendido que es importante practicar permanentemente para convertirme en la persona que yo quiero ser.

He aprendido que es muchísimo más fácil reaccionar que pensar… y más satisfactorio pensar que reaccionar.

He aprendido que siempre debo despedirme de las personas que amo con palabras amorosas; podría ser la última vez que las veo.

He aprendido que siempre puedo llegar mucho más lejos de lo que pensé posible.

He aprendido que soy responsable de lo que hago, cualquiera que sea el sentimiento que tenga.

He aprendido que, o controlo mis actitudes o ellas me controlan a mí.

He aprendido que por más apasionada que sea la relación en un principio, la pasión se desvanece y algo más debe tomar su lugar.

He aprendido que los héroes son las personas que hacen aquello de lo que están convencidos, a pesar de las consecuencias.

He aprendido que aprender a perdonar requiere mucha práctica.

He aprendido que el dinero es un pésimo indicador de valor de algo o alguien.

He aprendido que con los amigos podemos hacer cualquier cosa, o no hacer nada, y tener el mejor de los momentos.

He aprendido que a veces las personas que creo que me van a patear cuando estoy caído, son aquellas que me ayudan a levantar.

He aprendido que en muchos momentos tengo el derecho de estar enojado, mas no el derecho de ser cruel.

He aprendido que la verdadera amistad y el verdadero amor, continúan creciendo a pesar de la distancia.

He aprendido que simplemente porque alguien no me ama de la manera en que yo quisiera no significa que no me ama a su manera.

He aprendido que la madurez tiene más que ver con las experiencias que he tenido y aquello que he aprendido de ellas que con el número de años cumplidos.

He aprendido que nunca debo decirle a un niño que sus sueños son tontos; pocas cosas son más humillantes y qué tragedia sería si él lo creyera.

He aprendido que mi familia no siempre estará pendiente de mí, mientras otras personas no relacionadas suelen preocuparse por mí, amarme y enseñarme a confiar de nuevo.

He aprendido que por bueno que sea el buen amigo, tarde o temprano me voy a sentir lastimado por él y debo saber perdonarlo por ello.

He aprendido que no siempre es suficiente ser perdonado por los otros; siempre tengo que perdonarme a mí mismo.

He aprendido que por más fuerte que sea mi duelo, el mundo no se detiene por mi dolor.

He aprendido que mientras mis antecedentes y circunstancias pueden haber influenciado en lo que soy, yo soy responsable de lo que llego a ser.

He aprendido que a veces cuando mis amigos se pelean, estoy obligado a tomar partido aun cuando no lo deseo.

He aprendido que simplemente porque dos personas pelean, no significa que no se aman la una a la otra; y simplemente porque dos personas no discuten, no significa que sí se aman.

He aprendido que no tengo que cambiar de amigos si comprendo que los amigos cambian.

He aprendido que no debe afanarme averiguar un secreto; podría cambiar mi vida para siempre.

He aprendido que dos personas pueden mirar a la misma cosa y ver algo totalmente diferente.

He aprendido que por más que trato de proteger a mis hijos, ellos eventualmente se lastiman y con eso me lastimo en el proceso.

He aprendido que hay muchas maneras de enamorarse y permanecer enamorado.

He aprendido que sin importar las consecuencias, cuando soy honesto conmigo mismo llego más lejos en la vida.

He aprendido que muchas cosas pueden ser generadas por la mente; el truco es el autodominio.

He aprendido que por muchos amigos que tenga, si me convierto en su salvador,  me sentiré solitario y perdido en los momentos en los que más los necesite.

He aprendido que puedo cambiar mi vida en cuestión de horas ante la influencia de personas que ni siquiera me conocen.

He aprendido que aún cuando pienso que no puedo dar más, cuando un amigo pide ayuda, logro encontrar la fortaleza para ayudarlo.

He aprendido que tanto escribir como hablar puede aliviar los dolores emocionales.

He aprendido que el paradigma en el que vivo no es la única opción que tengo.

He aprendido que los títulos sobre la pared no nos convierten en seres humanos decentes.

He aprendido que aunque la palabra «amor» pueda tener diferentes significados, pierde su valor cuando se usa con ligereza.

He aprendido que es muy difícil determinar dónde fijar el límite entre no herir los sentimientos de los demás y defender lo que creo.

He aprendido... que nunca dejaré de aprender.

Con amor, 4s

lunes, 23 de abril de 2012

Sólo queda lo que damos



Sólo nos acariciará
el amor que prodigamos.


Sólo nos alegrará la sonrisa que regalamos.

Sólo nos refrescará el agua que
juntos bebimos.

Sólo nos alimentará el pan que compartimos.


Sólo nos cubrirá el vestido
 con que al prójimo arropamos.

Sólo nos descansará el cansancio 
del peregrino que hospedamos.

Sólo nos consolará la palabra
 con que reconfortamos.

Sólo nos guiará la verdad que proclamamos.

Sólo nos sanará el consuelo del enfermo que visitamos.


Sólo nos librará la vida nueva
del preso liberado.

Sólo nos dará paz la ofensa que perdonamos.

Sólo hará renacer la esperanza
la mirada que al cielo dirigimos
y las manos con que abrazamos.

Sólo nos conducirá a la Vida
la confianza que en el Padre depositamos.

Así, la humilde solidaridad de cada día,
como flor que en silencio entrega su perfume, construye fraternidad
y enriquece nuestras vidas…

Con amor, 4s

lunes, 9 de abril de 2012

Amabilidad






El decálogo de la amabilidad

Nos piden vivir en el presente. Para ello se requiere estar consciente. He aquí una de las maneras mas simples de generar ese estado, y que es a través precisamente de la amabilidad.

He aquí algunas reglas de fácil aplicación y con resultados sorprendentes. Creo todos hemos reconocido o recordaremos a personas que por su trato amable permanecen en nuestra memoria, incluso en nuestros corazones. Y fue justo ese pequeño detalle, esa sonrisa, esa disponibilidad, la que nos hace recordarlas.

1.    Procura reconocer y respetar los derechos y los méritos de los demás, y aceptar sus formas de pensar, aunque sean distintas de las tuyas.

2. Trata a los demás con el mismo respeto y cariño con el que te gustaría que te tratasen a ti.

3. Procura ser complaciente con los que te rodean cuando te piden un favor o solicitan tu ayuda.

4. Utiliza palabras como gracias, perdón, por favor, que te facilitarán y harán más agradable tu relación con los demás.

5. Intenta ver en cada persona lo mejor de ella. Seguro que lo encontrarás y te sorprenderá.

6. Acostúmbrate a expresar tus mejores sentimientos, no los reprimas. Trata a los demás con toda la naturalidad, la alegría y el afecto que espontáneamente salgan de ti.

7.  Acostúmbrate a sonreír. Muéstrate solidario, optimista y colaborador con las personas con las que convives.

8. Piensa que si todos tratamos de dar lo mejor de nosotros mismos todos seremos mucho más felices.

9. Trata de analizarte y observa si, cuando eres amable o afectuoso con los demás, te sientes más a gusto contigo mismo.

10. Comprueba cuántas horas al día estás de buen humor. Si son muchas, alégrate porque estás construyendo un mundo más amable.

Y una mas… procura aprenderte el nombre de las personas que te rodean, de los que te prestan servicios permanentemente, un mesero, el barrendero de tu cuadra, el cartero, etc. Y siempre que tengas la oportunidad, se amable, dirígete por su nombre mirándolo a sus ojos.

Con amor, 4s

miércoles, 4 de abril de 2012

Pecados Capitales



Seguramente has escuchado hablar de estos. En esta época en donde las costumbres cristianos celebran la crucifixión de Cristo y otros eventos relacionados, vale comentar sobre los mismos.

Algunos comentan que su origen se remonta al siglo IV, cuando el asceta Evagrio el Póntico –también conocido como el Solitario– fijó en ocho las principales pasiones humanas pecaminosas:

Ira
Soberbia
Vanidad
Envidia
Avaricia
Cobardía
Gula y
lujuria.

Un siglo más tarde, el sacerdote rumano Juan Casiano redujo la lista a los siete que actualmente conocemos (El orden no tiene nada que ver, así que los menciono alfabéticamente):

Avaricia
Envidia
Gula
Ira
Lujuria
Pereza
Soberbia

Fue el papa San Gregorio (540-604) quien los oficializó para establecer los principios básicos de convivencia entre los cristianos.

Dante Alighieri los incluyó en su magnífica obra La Divina Comedia.

Supuestamente ya antes habían sido mencionados por Gregorio Magno en el siglo VI en su obra Moralia (Busqué alguna referencia pero no encontré nada al respecto, pero si que Gregorio Magno, fue papá y recopilador de los cantos gregorianos, entre otras cosas).

Aristóteles en su Ética a Nicómano, escrita en el siglo IV a. C., hace cierta referencia a ellos, sobre todo en su capítulo relacionado a la Templanza, que es el medio para controlar los placeres (haciendo reflexión sobre lo que significa “Placer”), especialmente los del tacto, la comida y el sexo, que son aquellos que tenemos en común con los animales no racionales.

En la obra “Suma Teológica” que data del siglo XIII, Tomás de Aquino mencionó que el calificativo de capital no alude a la gravedad de estos pecados, sino a que ellos son el origen de otros vicios y pecados.

De igual forma, en las tradiciones religiosas, se les dio una representación al través de las piñatas navideñas, en donde la parte esférica es la tierra, y alrededor de la belleza de la misma y las cosas buenas, prevalecen los actos malos representados en sus siete picos. Finalmente, el palo con el que se le golpea “tiene” las virtudes para terminar con ellos.

Veamos en la siguiente tabla una breve descripción de los pecados capitales y la virtud contraria para combatir o contrarrestar a cada uno de ellos:

Pecado Capital
Breve descripción
Virtud para  vencerle
Breve descripción
Avaricia
Es el afán desmesurado por poseer riquezas, incluye actos como la deslealtad, la traición deliberada para beneficio personal, la acumulación de objetos, el robo y asalto, los engaños y la manipulación de la autoridad.
Humildad
 Reconocer que de nosotros mismos solo tenemos la nada y el pecado
Envidia
Deseo insaciable de tener algo que otro tiene pero a su vez, es el deseo de que el otro no lo disfrute. No se trata sólo de bienes materiales. La envidia acarrea mentira, traición, intriga y oportunismo.
Generosidad
Aunque la "Caridad" esta considerada como una de las tres virtudes teológicas, debe entender mas como el deseo de hacer siempre el bien al prójimo, mas que el de amar a Dios sobre todas las cosas y por ende a nuestros semejantes. Generosidad en el sentido de desprendimiento de compartir nuestras cosas
Gula
También conocida como glotonería es el consumo excesivo de comida y bebida, sin moderación ni límites. Consumo irracional e innecesario de cualquier sustancia, en forma autodestructiva.
Templanza
Moderación en la atracción de los placeres y procura el equilibrio en el uso de los bienes creados. Asegura el dominio de la voluntad sobre los instintos y mantiene los deseos en los límites de la honestidad.
Ira
Pasión desmedida que causa indignación y enojo. Es el deseo de venganza, el odio y la intolerancia. Es actuar violentamente, sin pensar. Es conducirse irreflexivamente, sin un mínimo nivel de paciencia.
Paciencia
Actitud para sobrellevar cualquier contratiempo y dificultad.
Lujuria
Es el vicio basado en deseos sexuales desmedidos. Actualmente se cree que si no se causa ningún daño a otros con determinada práctica sexual, si no se ofende a nadie exigiéndole compartirla, entonces sólo es un apetito desordenado.
Castidad
Comportamiento voluntario a la moderación y adecuada regulación de placeres y/o relaciones sexuales, ya sea por motivos de religión o social. No es lo mismo que abstinencia sexual.
Pereza
Falta de estímulo o deseo de hacer cosas. Desgano, aversión, disgusto, desmotivación, son algunas de las emociones relacionadas. El perezoso resigna por su propia comodidad, el hacer trabajos para la comunidad o para él mismo. Es no tener ganas de hacer nada.
Diligencia
Es el esmero y el cuidado en ejecutar algo. Significa cumplir con los compromisos, no ser inactivo, proponerse metas fijas y cumplirlas en su tiempo, poner entusiasmo en las acciones que se realizan. No confundir con su contrario, la negligencia
Soberbia
Es el orgullo desmedido, la necesidad de ser preferido antes que otros.  El soberbio es un individuo que se cree superior a los demás pero teme al ridículo por lo que cualquier comentario dudoso sobre sí mismo lo considerará una burla. Es sinónimo de vanidad. La excelencia no es soberbia, pero en cuanto alguien se ufana de ello, se convierte en pecado.
Humildad
Es la característica que define a una persona modesta, alguien que no se cree mejor o más importante que los demás en ningún aspecto; es la ausencia de soberbia.

Adicionalmente, mas no por ello necesariamente modernizando los conceptos anterior, el 10 de marzo de 2008, el Vaticano presentó una actualización de la lista de los Pecados Capitales, basados en la conciencia social:

No realizarás manipulaciones genéticas.
No llevarás a cabo experimentos sobre seres humanos, incluidos embriones.
No contaminarás el medio ambiente.
No provocarás injusticia social.
No causarás pobreza.
No te enriquecerás hasta límites obscenos a expensas del bien común.
No consumirás drogas

Habría que agregar a esto, el “No usarás ningún método anticonceptivo, excepto los reconocidos por la propia iglesia” (El 25 de Julio de 1968 el papa Pablo VI dictó la carta Encíclica Humanae Vitae, donde se prohíbe cualquier método anticonceptivo porque son contrarios a la naturaleza que Dios ha dado para reproducirnos. En uno de los párrafos señala: “Igualmente Inaceptable, como ha declarado la autoridad magisterial de la iglesia frecuentemente, es la esterilización directa, bien sea perpetua o temporal, bien sea del hombre o de la mujer“.

Algunos filósofos opinan que el pecado resulta necesario, no tanto como modelo a seguir, sino como fuente de reflexiones sobre uno mismo.

Gaby Vargas, periodista mexicana, menciona tres nuevos capitales

Lo Lento, es decir, nuestra sociedad va en contra de todo lo que se tarde, en la tecnología, la comida, y en todo lo demás. Ya no nos damos tiempo de disfrutar en esa espera. El horno de micro ondas, la comida rápida, el internet, etc. Lo rápido es lo de hoy.

La Gordura. Si bien podría asociarse con la gula, en la época actual prevalece la esteticidad por lo delgado. Existe un natural rechazo a quien este fuera de la moda. Si no estás delgado estás out.

Finalmente, menciona que lo Viejo. Todo lo relacionado con lo viejo. Vivimos permanentemente por conseguir lo mas actual, lo mas reciente, queremos todo lo recién hecho, sin importar nos aportará mayor beneficio. El nuevo coche, el nuevo cel, la nueva Tablet, etc.

Finalmente, considero que hacer el bien, dar amor, y sonreír, son virtudes que todo ser humano tiene.

Con amor, 4s