miércoles, 6 de mayo de 2009

PERDONAR, DECIR ADIÓS Y OLVIDAR


Tres palabras imposibles cuando se ama de verdad, pero son tres pasos muy importantes para la superación de uno mismo.

La primera es:

PERDONAR

Y hacerlo de corazón. ¿Cómo saber que lo has hecho? Porqué en tu interior no hay rencores ni remordimientos y puedes dar una segunda oportunidad, cuando ves el interés de la persona que te lastimó.

Si esa persona no pide una segunda oportunidad y solo pide tu perdón, no hay que sentirse mal, puesto que al menos reconoció que cometió un error, es de humanos hacerlo y el hecho de que alguien no te quiera como uno quisiera, no significa que no te quiera. Pero si esa persona no pidiera perdón, hay que dárselo de todas maneras, puesto que el perdonar purifica tu alma y hay que pensar que, a pesar de lo que haya pasado, esa persona te hizo sentir la persona mas feliz de este mundo y te hizo pensar que no te faltaba nada.

Durante algún tiempo así fue y es eso lo que nos tenemos que llevar, lo bueno de las cosas y nunca lo malo, puesto que lo malo solo hay que retenerlo en la mente como experiencia y aviso de no volver a cometer el mismo error. Y no esa que el amar y entregarlo todo sea un error, sino que a veces hay que tomar las debidas precauciones y conocer bien a la persona, antes de decidir regalarle tiempo de tu vida y reservarle un lugar especial en tu corazón. Perdonar es difícil, cuando tienes que hacerlo con alguien más que indispensable en tu vida. Pero no es imposible.

A veces, cuando amamos decimos, te perdono, pero en realidad lo decimos porque seguimos cegados por su amor. Eso no es perdonar.

El perdonar toma tiempo.

Implica también perseverancia, a veces sufrimiento, pero llega un día en que te acuerdas del dolor causado en el pasado y en el presente ya no te duele. Eso, es perdonar.

Algunas veces, a quienes tenemos que perdonar es a nosotros mismos. No seamos tan crueles con nosotros, equivocarse es de humanos y si esa persona era para ti, te sabrá perdonar y si no puede hacerlo, algo mejor te espera, no te lastimes con el pasado, ni temas al futuro, mejor aprovecha el presente.

DECIR ADIÓS

Es lo peor que te puede pasar cuando tú no quieres decirlo. Pero no puedes retener a las personas junto a ti, condenándolas a la infelicidad.

Cuando amas a alguien deseas su bienestar, cierto?

Entonces, no lo condenes a esa vida efímera y rutinaria. Si es lo mejor para esa persona, tienes que aceptarlo, dejarlo ir y pedir porque le vaya bien en su vida. A veces, es mejor decir adiós de tal manera, que ambos se recuerden con gratitud por los tesoros compartidos y no seguir con una relación destinada al fracaso, en la que ambos resultaran lastimados. Saber decir adiós a tiempo, es lo que muchas veces tenemos que aprender, porque a veces afectan a terceras personas.

Piensan que no se dan cuenta, grave error: son los que más pueden ver las cosas, por eso es mejor la separación en muchas ocasiones. Recuerda que, para que querer alcanzar la luna, si podemos alcanzar las estrellas. Hay que buscar siempre las cosas grandes y no las pequeñas, lo imposible y no sólo lo improbable, porque quien no sueña, nunca logra nada significativo en su vida; es mejor una palabra a tiempo que cien a destiempo.

Pero si ese sueño imposible no puede volverse realidad, es momento de decir … adiós

OLVIDAR

El último paso y el más difícil. En el momento, nos sentimos morir y pensamos que jamás podremos olvidar. Grave error, porque nosotros podemos hacer cualquier cosa que nos propongamos. Muchas veces, cuando no podemos olvidar a alguien y pasa el tiempo, es porque no queremos hacerlo y nos aferramos a su recuerdo por razones que a veces hasta nosotros mismos desconocemos. El querer es poder, en el momento en que decidas dejar de sufrir por alguien que no lo hace por ti, en ese mismo instante empezaras a olvidar, porque estas consciente de que no es algo que puedas hacer de la noche a la mañana. Es un enorme camino que recorrer, y aunque a veces no le encontremos fin, si lo tiene, para ello intenta dos pasos para adelante y uno para atrás, porque por más que queramos, en el proceso vamos a tropezar infinidad de veces; lo importante es que avances más de lo que retrocedes y que no te pierdas en el camino. Ya que es como una tortura el camino del olvido, porque nos reprochamos cosas que no tienen coherencia y nos cuestionamos tantas cosas, y que además nunca nadie nos va responder. Sólo estamos perdiendo nuestro tiempo, con el simple hecho de pensarlas.

Lo mejor que podemos hacer, es arrojar los porqués al viento y seguir adelante, no hay que permitir estancarnos por pequeñeces (Que a veces vemos muy grande, sin serlas), piensa que lo mejor aún no viene y espera por tí.

OLVIDAR es una palabra que deseamos no usarla nunca, pero desgraciadamente hay que hacerlo. Por eso, cuando tenemos a alguien que amamos, no hay que ponernos límites, hay que disfrutar cada instante que pasamos a su lado, porque nunca sabes cuando será la última vez. Hay que entregar lo mejor de nosotros, de tal manera que cuando llegue a su fin, no nos arrepintamos de nada.

PERDÓNAME, DIME ADIÓS Y OLVÍDAME Es difícil y duro, pero ni eso nos debe derrotar, no debe derrotarte… puesto que a pesar de los fracasos, seguirás de pie.
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Con amor, 4s

2 comentarios:

  1. Y cómo hacés Calambur cuando perdonaste, dijiste adiós y estás tratando de olvidar y esa persona te vuelve a dañar desde otro plano, pero uno en el cual vos decís: no puede ser que me haga esto siendo lo que fuí en su vida? Cómo hacés? empezás todo el proceso de nuevo? Ahora ya tenés que perdonarle esto último...bueno y si vuelve a repetir las agresiones? hablo de las del alma simplemente o no simplemente, digo que no hablo de agresiones físicas que ya son algo que da lugar a otros remedios, no a las agresiones del corazón, a la humillación, a la total y absoluta indiferencia hasta en los peores momentos...habías llegado casi a terminar de perdonar y nuevamente!! Basta!! qué se hace? decime cómo hacés? Decir adiós no cuesta nada en este caso, es más quisiera no verlo jamás en mi vida, pero cómo perdonar y sobre todo cómo olvidar tanto dolor si te marcó, si te dejó humillado y con sensación de descarte? No, amigo esto sí que no es tan fácil, mejor diría yo no es nada fácil, es muy dificil lograrlo aunque uno quisiera para alcanzar finalmente la paz tan necesaria y por lo menos quedarse así en paz; porque encima tanto daño te genera una inmensa sensación de rechazo a todo lo demás, no querés iniciar nada nuevo, noooo, quedás aterrorizado y preferís la soledad...que muchas veces duele...pero no tanto como la humillación, el rechazo, el olvido y la indiferencia.

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  2. Diferentes concepciones nada más. Diferentes visiones de la vida; diferentes maneras de aplicar nuestras experiencias y vivencias.

    Se que es muy personal y que seguramente estoy equivocada pero insisto; yo no tengo complejo de Dios para tener el poder del perdón; en su lugar, me encargo de permanecer libre de rencores

    Se decir adiós y se mantener la firmeza y la implacabilidad que se requiere para saber sostenerme y ver hacia otro horizonte que no sepa dañarme más

    Pero olvidar no, no se olvidar. Tampoco pretendo aprender, ya que aprendí a extraer lo mejor de cada situación

    Se seguir de pie, se mantenerme con la frente en alto y se levantarme cada vez que se requiera


    Con amor, 4s!

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