lunes, 24 de mayo de 2010

MOVIMIENTO


Andar o no andar, ahí está la cuestión.

Llegar a donde deseas llegar puede tomar meses, años y hasta décadas. Sin embargo, puedes empezar a moverte en dirección a esa meta en este instante.

Estás donde estás, ahora mismo, y nada modificará el camino que ya has recorrido. Por supuesto que puedes cambiar completamente el rumbo en el cual te has movido.

Opta por seguir una dirección determinada y, sea cual sea tu situación actual, verás que mejorará instantánea y significativamente. Una vez que te hayas concentrado en generar una realidad positiva para tu mundo, esa realidad comenzará a tomar forma.

Aunque los desafíos que tengas por delante puedan ser muchos, no se comparan con la fuerza de tu resolución. Para activar esa fuerza ahora mismo, encamínate en una dirección determinada.

Tienes en tus manos la decisión hacia dónde será el próximo paso que vas a dar. Y sea cual sea el próximo paso, es el que va a definir tu dirección.

En cualquier momento, no importa cuál sea la situación, el poder de elegir cuál será la dirección en la que te encaminarás está en tus manos, y se tornará real en el preciso instante en el que hagas con ella. Haz que tu dirección sea clara y plena, ahora mismo y siempre.

La consecuencia de las cosas está precisamente en el movimiento.

Quedarse inmóvil no hará que las cosas sucedan ni llegaran solas. Si bien siempre pasaran cosas y sin duda quedarse quieto tendrá también consecuencias o efectos, nuestra intención provoca que las cosas sucedan.

Es tu decisión moverte… es tu decisión hacia dónde… es tu decisión no moverte…

Es tu decisión.

Con amor… 4s

2 comentarios:

  1. Vivir es acción y en tanto tal, movimiento. Interesante tema. Grata música. Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. Y a veces también, surgen decisiones alternas que impiden cualquier tipo de logro; lo interesante será el saber bien afrontarlo


    Con amor, 4s!

    ResponderEliminar