CICLOS DE LA VIDA (parte 4 de 6) VERANO

Qué es el VERANO

La segunda etapa transcurre entre los 21 a los 42 años, la VISIÓN es del aquí y el ahora y hay más futuro que pasado; pero sucede muchas veces que se vive (V) al vapor por brincarse primaveras. Aquí es el MOMENTO en donde se germina lo sembrado. El AROMA es el de la PASIÓN que implica un apego a la adicción misma del verano. Arrebatada, superficial, escandalosa y ruidosa es la vida de muchos y equivocadamente se cree que eso es la pasión, pero eso es un rapidín, un desfogue; el verdadero sentido de la pasión, que no es un arrebato ni soltarse la greña, es disfrutar el presente con un matiz que tiene más futuro que pasado.

El (V) implica APERTURA, INTENSIDAD y AHONDAMIENTO, es la máxima entrega a todo lo que soy, con pasión y no con apego. La “Apertura” nos habla de un clima de confianza derivado de la asimilación de la primavera en donde esa incertidumbre cruza el umbral y el punto de maduración ya vívido, se emiten votos de confianza, hay relajación como si fuera un juego, ya que si no hay confianza no hay apertura, ni en las relaciones personales, ni en el trabajo ni en nada. Luego viene la “Intensidad” ya que a mayor apertura mayor intensidad y viceversa y tiene que ver con el nivel de variantes y con la información, es una forma de diversidad y la abundancia; muestro todo mi ser, con sus luces y sus sombras, me abro a la diversidad de eventos. El negar mis sombras me lleva a un resultado de defensa que se traduce en tensión y destruye la pasión.

El “Ahondamiento”, es el ser aceptado por cómo es y al mismo tiempo, aceptar a los demás cómo son por lo que son. Es el momento de asumir compromisos, ya que si no los hay, no habrá cosecha. Recuerda, tu granero será del tamaño de tu nivel de confianza, siempre derivado de tu entrega en la etapa previa (en la “P”).

La Pasión cruza las distancias, implica un fervor, que no apego, con imaginación inspirada e inspiradora.

Pero como todo, el “V” tiene sus luces y sombras, la pasión es estructurada y clara, no superflua, y depende del nivel de apertura que se da en la confianza, a mayor confianza, mayor apertura y de ahí el ahondamiento y la pasión se multiplica en el compromiso. En la medida en que se expone el ser hay pasión, en la medida que se preserva, no hay pasión, ya que para arrebatos superfluos esta la primavera.

Pero el MIEDO de esta temporada lo marca la “Necesidad de Control” que deviene en suicidios, homicidios, etc., ya que es tanto el ahondamiento y la pasión que se convierte en apego en enamoramiento; la pasión se vive en conciencia con confianza que se da mediante el factor tiempo. Quién abre su corazón en un día, además de ingenuo es pen.dejo, ya que no puede darse el clima de confianza de un día para otro, es un verano improvisado y la pasión se convierte en locura y el riesgo es necesidad de control. Pregúntate: ¿Qué tanta necesidad de control tengo?, del tamaño de tu respuesta es tu apego. Lo que se debe hacer es transcender esa necesidad y entonces surge una pasión maravillosa, no hay miedo, nada importa, ni el engaño o la muerte, no me puede lastimar con nada y llego al nivel más alto de mi ser, porque no hay control, existe total permisividad, puedes hacer todo lo que quieras y yo también, pero si lo que haces deja de resonar se acaba la pasión.

Como ves, el Verano es un momento de alta definición, con una cercanía intensa, es amar con la máxima libertad y la mayor intensidad, se enriquece el que ama y no el que es amado, lo contrario es el MIEDO AL RECHAZO.

Aquel que se entrega por completo y siente un temor descomunal, es tan grande que se manifiesta desde la (P) con una reacción de defensa. Te rechazo antes de que me rechaces, ya que si no se cruza nunca el umbral del compromiso fingiendo una falsa seguridad, se vuelve a repetir el ciclo de la (P) y no evolución.

Hay pasiones que te parten la madre porqué como ya me entregue, me apego y te pego. Surge al máximo tu máscara, esa careta que se construye en la edad temprana, también del mayor sufrimiento que destroza, a mayor apego mayor dolor, no nos permite ver otras posibilidades, todo se anula y surge la obsesión.

El (V) como has notado, es el momento de las relaciones en pareja y cuando se vive en plenitud nunca será comparable con cualquier relación de la (P), por lo tanto, nunca pidas o esperes nada de tu pareja, sólo observa y disfruta, entrégate con plenitud, ya que si conoces tus límites, las estructuras de las etapas y las asumes con responsabilidad, se alcanza la libertad, de lo contrario, te esclavizas con eso.

Si vives impecable el verano, implica que previamente hayas vivido impecablemente la (P) para entrar de lleno y con fuerza a la siguiente etapa, que el OTOÑO. Recuerda, el (V) define el rumbo de las personas con base a lo vívido en la (P), es la máxima pasión con el mayor desapego.