martes, 8 de junio de 2010

EL BICENTENARIO…

Buscando algo para reflexionar sobre los “festejos”, viene a colación una anécdota de la época de la Revolución.

El titular de “Hoja Suelta” del 20 de noviembre de 1901 decía: “Los 41 maricones encontrados en un baile de la calle de la Paz

La crónica: "La noche del domingo fue sorprendido por la policía, en una casa accesoria de la 4a. calle de la Paz, un baile que 41 hombres solos verificaban vestidos de mujer. Entre algunos de esos individuos fueron reconocidos los pollos que diariamente se ven pasar por Plateros. Éstos vestían elegantísimos trajes de señoras, llevaban pelucas, pechos postizos, aretes, choclos bordados y en las caras tenían pintadas grandes ojeras y chapas de color. Al saberse la noticia en los boulevares, se han dado toda clase de comentarios y se censura la conducta de dichos individuos. No damos a nuestros lectores más detalles por ser en sumo grado asquerosos…"

Con el subtítulo "Aquí están los maricones muy chulos y coquetones", la crónica continuaba en verso, mismos que decían (-la verdad no peca pero incómoda-):

"Hace aún muy pocos días
Que en la calle de la Paz,
Los gendarmes atisbaron
Un gran baile singular.

Cuarenta y un lagartijos
Disfrazados la mitad
De simpáticas muchachas
Bailaban como el que más.

La otra mitad con su traje,
Es decir de masculinos,
Gozaban al estrechar
A los famosos jotitos.

Vestidos de raso y seda
Al último figurín,
Con pelucas bien peinadas
Y moviéndose con chic."

Abanicos elegantes
Portaban con gentileza,
Y aretes ó dormilonas
Pasados por las orejas.

Sus caras muy repintadas
Con albayalde ó con cal,
Con ceniza ó velutina....
¡Pues vaya usté á adivinar!

Llevaban buenos corsés,
Con pechos bien abultados
Y caderitas y muslos......
Postizos....pues está claro.

El caso es que se miraban
Salerosas, retrecheras
Danzando al compás seguido
De música ratonera.

Se trataba, según dicen,
De efectuar alegre rifa
De un niño de catorce años,
Por colmo de picardías.

Cuando más entusiasmados
Y quitados de la pena,
Se hallaban los mariquitos
Gozando de aquella fiesta.

Pum! que los gendarmes entran
Sorprendiendo á los jotones!
Y aquello si fué de verse....
¡Qué apuros y que aflixiones!

Algunos quieren correr,
O echarse dentro el común
Otros quieren desnudarse
A otros les dá el patatús.

Una alarma general....
Lloran, chillan, y hasta ladran,
¡Qué rebumbio! ¡Qué conflictos!
Pero ninguno se escapa.

A todos, uno por uno
La policía los recoje,
Y á Tlapisquera derecho
Se los va llevando al trote"

Te fijaste la fecha… si… 20 de noviembre…. Te fijaste del número… ajá… 42… seguro?...; viene ahora la otra parte, pues en realidad la nota anterior indicaba 41, no 42… es decir, ya desde entonces y "denantes", existía las influencias y modificaciones a los medios informativos…

Bueno. Lo de "denantes", no sólo es eso… también la homosexualidad (Nada nuevo), sin embargo, el motivo de la presente es divulgar la historia del que pasó a ser un fatídico número.

Pues resulta que, imagínense la época, el escándalo, la detención, el chismarajo… y pa’colmo… uno…, dos… bueno, varios… eran de la “High Society”, personajes influyentes o con parientes influyentes.

Porfirio Díaz, aún presidente de México, y por las personalidades inmiscuidas, es informado del incidente. El encargado de darle la noticia fue su Secretario de Gobernación, el Sr. Manuel Romero Rubio (Quién por cierto, era suegro de Porfirio Díaz); Díaz le pide a éste manejar el asunto con "discreción" para evitar que la prensa se entere. Romero Rubio explica que son cuarenta y dos detenidos, y le extiende a Díaz la lista con "nombres importantes, la mayoría conocidos", incluyendo a un Ignacio de la Torre. Díaz observa la lista y tacha un renglón diciendo: "Son cuarenta y uno." "Cuarenta y dos, Señor." "Cuarenta y uno, don Manuel." "Comprendo. Cuarenta y uno." "Haga hasta lo imposible por evitar el escándalo. Hable con las familias y, a los que pueda, déjelos salir discretamente.

De ahí se vuelve popular la famosa expresión de los 41 para referirse a ese grupo de preferencias sexuales distintos, según la nueva terminología; pero regresemos… quien era el Sr. 42? Ni más ni menos que el yerno del mismo Díaz… casado con su hija “Amada Díaz”; en fin, el hecho nunca fue comprobado ni desmentido, por lo que se dio por cierto y además se convirtió en mito.

Estudiado por muchos, entre ellos por Carlos Monsiváis, la lista fue imposible de rescatar y muchos quedaron en el anonimato, prevaleciendo sólo los 41 y “Nacho de la Torre”.

Por otro lado, en un ensayo Bautista (sepa quién era, ja ja.. no encontré la referencia completa) cita un pasaje del libro Símbolos y números, de Francisco L. Urquizo, en el que demuestra la homofobia cultural que ha resultado de la sinonimia que en nuestro país se hace del "número escarlata" con el homoerotismo: "En México el número 41 no tiene ninguna validez y es ofensivo para los mexicanos [...] La influencia de esa tradición es tal que hasta en lo oficial se pasa por alto el número 41. No hay en el ejército División, Regimiento o Batallón que lleve el número 41. Llegan hasta el 40 y de ahí se salta al 42. No hay nómina que tenga renglón 41. No hay en las nomenclaturas municipales casas que ostenten el número 41. Si acaso y no hay remedio, el 40 bis. No hay cuarto de hotel o de Sanatorio que tenga el número 41. Nadie cumple 41 años, de los 40 se salta hasta los 42. No hay automóvil que lleve placa 41, ni policía o agente que acepte ese guarismo" No me consta de esta animadversión, pero seguramente por algo lo dicen…

En fin… cuando se hace referencia los 41, ya conoces su origen. Igual y me pregunto…
no será otra realmente la razón del festejo en el 20 de noviembre?... en fin.

Con amor, 4s

1 comentario:

  1. ¡Buen punto!

    Hahahaaaa ツ

    Por acá también es irremediablemente temido el 41. Cuando tuve 41 años, osaba repetirlo frecuentemente

    - Cuídense en exceso, que llegué a los 41 y no respondo chipote con sangre

    Hahahaaaa ツ

    Había quienes se lo tomaban en serio, había quienes dudaban y al fin salí

    ¡ILESA!

    Hahahaaaaa ツ



    Estas y más celebraciones se están isntitucionalizando a tal grado, que por lo menos a la burocracia, nos las están enmarcando como OBLIGATORIAS, ya que de manera voluntaria, no se obtuvo la mínima concurrencia externa al mismo gremio


    ¡Felicidades!


    Con amor, 4s!

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